Estos últimos años el color dorado se estaba imponiendo en la decoración de nuestras casa. Tengo que confesar que a mí no me gusta mucho y no tengo nada de ese color, pero para mí alegría este está siendo desterrado por otro color, el COBRE.
Aunque parezca que está apareciendo en la decoración últimamente, en rehabilitaciones se lleva usando bastante tiempo para dejar las instalaciones de electricidad vistas (por lo menos por estes lares).
La verdad es que es un color que va bien con cualquier otro, está la combinación con colores pasteles, con blanco, pero si de verdad queréis que el cobre saque todo su poderío su pareja perfecta es el negro.
Hay dos opciones, aplicar la combinación en pequeños complementos o detalles (para los menos atrevidos) o...
lanzaros y pintar una pared en negro para que los detalles en cobre destaquen.
Que me decís, ¿sois más de cobre o de dorado?
Y por hoy nada más, me vuelvo corriendo a la obra (la que tengo liada en casa)
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